Hoy es una tarde muy especial
porque es el cumpleaños de Chocolate. Todos los duendes y hadas estaban
invitados al festejo, cada uno debía llevar algo rico para compartir.
Cada fiesta se celebraba de una
manera especial y distinta. Para esta ocasión se eligió el Arco de Otoño, que
era un rincón del Valle muy especial porque en cierta época del año se llenaba
de Hojas que cubrían el piso y armaban un colchón crujiente.
Para cada festejo del Valle o la
Pradera, Vainilla y Chocolate le pedían ayuda a Graciela y Estela para armar el
menú. Para el día de hoy habían elegido Torta de Chocolate , budines
de frutilla, jugos frutales de
naranja y pera, masitas de chocolate y alfajores
de oreo, y como regalo para todos un metegol.
Además, Nina junto a sus amigas
había preparado unos arreglos con globos muy coloridos y divertidos.
Todo estaba armado a la perfección para disfrutar de una gran tarde y una hermosa fiesta. De a poco empezaron a llegar los invitados, primero llegaron los duendes saltarines arriba de sus scuters dando un show de hadas. Luego llegaron las haditas tejedoras que traían muchas lanas y telas para compartir. También llegaron las brujitas con trucos y con la Hada del viento, ellas fueron las invitadas especiales. Por último, cuando ya casi no faltaba nada, llegaron Chocolate y Vainilla, con Canela y Café, porque el festival incluía a todas las mascotas de cada uno de ellos.
A medida que cada uno iba
llegando elegía un rincón abajo del puente para acomodarse y
disfrutar del gran banquete. Más tarde, se realizarían juegos y
actividades para entretener a los más pequeños; y por último, las hadas y
duendes junto a las mariposas danzantes harían un espectáculo de vuelo, luces y
color.
Que lindo el festejo de
cumpleaños de Chocolate!, inolvidable fiesta para todos los
habitantes de la Pradera Dulce Miel y el Valle Merengue Encantado.