domingo, 4 de febrero de 2024

Misterio en la noche iluminada

 Era una noche muy oscura, el bosque estaba tranquilo y solo se veían en el cielo un par de estrellas y la luna blanca que iluminaba unos pocos arboles.

Vainilla y sus amigas habían estado todo el día volando el pueblo mas cercano y ayudando a varios niños que andaban por allí. Estaban tan cansadas que cada uno se había ido a recostar a su habitación, sin siquiera pensar en comer.

La Pradera Dulce Miel estaba en un momento de mucha calma. Mientras tanto, en el Valle  de al lado, Chocolate preparaba una fiesta sorpresa para despedir a un par de duendes que habían decidido mudarse a otra aldea.  Como era de noche, Chocolate pensó que la mejor opción era hacer una fogata, con música, cuentos, mucha comida, y pasar un rato juntos, ya que a la mañana siguiente, Tintín y Tontón emprenderían su viaje.

Chocolate no le había contado a nadie de sus preparativos, iba a dejar todo listo para luego llamar a todos los amigos y compartir la cena a la luz de la luna y la fogata. Lo primero que tenía que hacer era prender el fuego, con las ramas del árbol de Olivo que había conseguido.  Y así lo hizo. Pero al instante escucho un ruido raro y SAS! el fuego de apagaba. U que viento molesto dijo chocolate! Me apaga el fuego y así no voy a poder avanzar. Lo prendió devuelta, pero a los 3¿2 segundos SAS! se volvió a apagar....Que extraño pensó, me pondré los anteojos para encender mejor las llamas, a ver si prendiendo todas las maderas logro que el fuego sea mas fuerte.

Una vez terminada la fogata, fue poniendo en algunas bandejas toda la fruta y los dulces que había preparado para sus amigos. Acomodaba manzanas, bananas, uvas, chocolates, caramelos y hasta algunas galletitas. Caminó unos metros para  terminar de traer lo que le faltaba y escucho algunos pasos inquietantes....

Quien anda ahí?, vamos chicos ya me descubrieron salgan y ayuden!, grito chocolate pensando que eran sus amigos que se habían dado cuenta del plan.  Pero cuando Chocolate se dió vuelta, nadie estaba allí, aunque noto que alguna fruta había desaparecido. Mmm, que raro!?, pensó, y ya se estaba poniendo un poco nervioso....

Quien anda ahi?!, exclamo ya más preocupado. Chicos son ustedes?, iluminó con una linterna los arbustos y vio que algo se movía....era algo de color rosa, un poco amarillo, chiquito pero intenso....

Chocolate tenía muchísimo miedo, no sabía que era eso que estaba detrás de la vegetación pero sabía que nada ni nadie podía arruinarle la despedida a sus amigos. Así que  agarro una rama media larga que había por allí, para poder defenderse en caso de necesitarlo y corrió hacia el arbusto empujando la rama para que abra las hojas y grito: Quien anda ahi! confiesa YA!

Somos nosotras!!!! no te asustes Chocolate, grito Vainilla que salió de atrás de las hojas con sus amigas y las manos llenas de la comida que habian tomado de la fogata.

Pero que están haciendo?!, les pregunto el duende. Perdón Chocolate, olimos el aroma de todo lo que estás preparando y nos acercamos a ver si podíamos unirnos a la fiesta, pero como te vimos tan concentrado preferimos esperar a que termines. Lamentablemente nuestra pancita hacia mucho ruido y esas frutas y golosinas se veían deliciosas....

Pero por favor, que susto me dieron!, pasen y ayuden que ya proto termino y les decimos al resto que se unan a nuestra despedida.

domingo, 3 de septiembre de 2023

Ultimo tramo

 Estamos muy cerca de llegar!, dijo Vainilla con gran entusiasmo, ella y Chocolate volaban en sus M--------(Mariposas) rumbo al otro lado de la colina.

Tenían una última oportunidad de encontrar las s------- (semillas) para reestablecer su árbol mágico en la aldea.

Tenías algunas pistas que podían acercalos pero si tomaban el camino incorrecto perderían para siempre su magia.

A medida que subían de altura, podían ver todo  tipo de F-----(flores) a lo largo del campo, donde también había algunos animales descansando bajo la sombra de los Á------(arboles) que se movían bajo la brisa del viento suave de verano.  Tenían que decidir donde bajar, podían empezar investigando la G----- (granja) o seguir un poco más en busca de la aldea secreta. Ellos tenían una pista importante  que uno de lo B---- (búhos) le habían revelado antes de partir: "Se que las semillas fueron robadas, y las tiene el H--------" (hechicero) Ramplin, su magia es la más extraña de todos los tiempos, y ha escondido las semillas tan bien, que no se si podrán encontrarlas.

Con esa pista, Vainilla y Chocolate fueron directo a la Aldea y aterrizaron en la casa de Ramplin, que aparentemente estaba vacía. Vamos Chocolate, debemos apurarnos!....

Al entrar en la casa, un brillo mágico y dorado se veía por todo el lugar, como si fuera de polvo de O-- (oro) esparcido por el aire. La casa del hechicero era como un pequeño laberinto, asi que el duende y la hada dieron vueltas por todos los cuartos hasta que en uno encontraron un  objeto, de donde salía un brillo mucho más fuerte, más dorado, casi tan intenso que no podían mirarlo. Era todo medio extraño, porque no había ningún lugar secreto....Parece que el hechicero estaba por hacer un viaje, entonces habia dejado cerca de la puerta una M------ (mochila) y algún abrigo.  El brillo salía de allí. Vainilla corrió, abrió casi sin pensar el cierre, y finalmente dentro de un P------(paquete) rosado  encontró lo que tanto esperaban.

Vamos!, dijo Chocolate, salgamos de aquí antes que llegue Ramplin y vuelva a quitarnos las semillas. Por suerte y con ayuda de todos, lo logramos! Recuperamos la magia para todo nuestro pueblo!


domingo, 18 de junio de 2023

En busca de las semillas de oro: una ayuda necesaria

 Aterrizaron cuando ya era de noche, y a penas podían ver algún lugarcito para que sus mariposas reposen y descansen.

Vainilla y Chocolate estaban convencidos que el bosque empinado sería una gran aventura para descubrir las pistas necesarias para encontrar sus semillas doradas. Pero era de noche, y debían acampar.

Armaron un par de camitas con hojas y ramas y cayeron rápidamente en un sueño muy profundo.

A   la mañana siguiente, un par de Búhos gigantes los despertaron diciendo: ¿Qué hacen aquí?, quienes son ustedes?

Chocolate se levantó sobresaltado, y Vainilla apenas podía levantar las alas. Le explicaron a sus amigos nuevos quienes eran y de donde venían y porque estaban en el bosque.

Las semillas doradas están al otro lado de la colina, les explicaron ellos, para cruzar tienen dos caminos, puede cruzar a través del lago sereno, o sino, tomar la subida al monte pero deben hacerlo rápido, antes que oscurezca otra vez, por cualquier de los caminos, nosotros los guiaremos hacia ellos, porque el bosque empinado tiene un laberinto muy difícil de resolver.

Vainilla y Chocolate tomaron algunos frutos que había por allí y emprendiendo el camino que los llevaría a la próxima aventura. Se metieron al laberinto y se dieron cuenta que los búhos tenían razón. Tardaron un poquito en encontrar la salida pero juntos pudieron hacerlo!.

Bueno, hasta aca llegamos, ahora siguen ustedes hasta la próxima parada. Nos veremos pronto! y ojala encuentren las semillas doradas que tanto necesitan!

Gracias a ustedes por ayudarnos y acompañarnos!

Listos para subir la colina, con sus mariposas acompañándolos, comenzaron la subida.




domingo, 12 de marzo de 2023

Un sueño peculiar

 Despierta ya Vainilla!, gritó Chocolate con voz intensa y gruñona. Vainilla abrió los ojos y miró a su amigo casi sin entender lo que había sucedido. Vio además que estaban todavía en la Pradera y que aún les faltaba bastante recorrido para llegar al Bosque Empinado.  Chocolate le preguntó a su amiga que había pasado ya que mientras que ella dormía la había visto cantar, hablar sobresaltada, y de muchas otras formas...

Vainilla le explicó que había tenido un sueño muy raro. Resulta que mientras ibas a buscar un poco de agua al arroyo, me senté a descansar y cuando cerré los ojos  ya no recuerdo más nada, salvo el extraño sueño que tuve. Estaba en un bosque, con muchas flores de todos los colores y recuerdo que tenia que buscar un tesoro escondido, pero no sabia ni como ni por donde empezar. De repente comenzaban a aparecer diferentes animales que venían hacia mi con pistas para que pueda seguir mi camino. El primero en aparecer era un tigre muy simpático pero medio tímido, que a penas me saludaba y se escondía atrás de un árbol. Luego venía un oso muy perezoso, que a pesar del calor del sol de verano, usaba su bufanda y me ofrecía un chocolate caliente. El oso me dijo que estaba por el camino equivocado, y que el tesoro lo tenia el mono Julio. Yo caminaba unos metros y a lo lejos colgado de una palmera veía a un mono pero no tenía ningún tesoro, simplemente estaba rodeado de bananas....De repente, cuando me acercaba al mono y le preguntaba por el tesoro el señalaba hacia arriba. ¿Qué me quiere decir? pensé. Y  vi un avión pasar velozmente entre las nubes, y lo más gracioso era que vos lo manejabas!.

Chocolate se rio y le preguntó, pero entonces yo tenía el tesoro en tu sueño?, y Vainilla le dijo: Espera que te sigo contando todo lo que sucedió luego...

Para seguir al avión necesitaba volar muy alto, y nuestras mariposas no llegaban hasta allí, así que enfrente mío me esperaba un zorrito al lado de un globo aerostático, y el zorrito solo me dijo: Vainilla súbete aquí porque es la única forma de llegar al tesoro. Cuando estaba apunto de tocar el globo, el mismo se pinchó! y se desarmó por completo. En ese momento un viento fuerte se levanto y solo pude observar que pasaron enfrente mío corriendo a toda velocidad una llama, una cabra, y un león que iba atrás diciendo: Ha llegado el barco por fin!, el tesoro ha vuelto de la isla y es todo nuestro. Así que lo único que pude hacer es salir corriendo detrás de ellos....

Pero amiga, que sueño mas raro tuviste, y que paso luego?, llegaste al tesoro? eran las semillas que estábamos buscando?, Pregunto Chocolate ya muy curioso por ver el final.

No, dijo Vainilla, en ese momento no recuerdo muy bien, pero vi a lo lejos una especie de selva, con mucha vegetación, y un gran cofre custodiado por la jirafa Clorinda, y el elefante Pandulfo, camine unos pasos y de repente..... Chocolate exclama, "Llegaste al Tesoro!", No, le respondió Vainilla, escuché tu grito y me desperté!.


domingo, 12 de febrero de 2023

En busca de las semillas de oro: Emprendiendo el Viaje

 Hacía muchos días de un calor muy intenso en la Pradera Dulce Miel. Vainilla estaba preocupada porque en el valle de los girasoles de oro había notado  que comenzaban a secarse algunos tallos y a caerse varias hojas y pétalos. El girasol de oro era una de las fuentes de vida más importantes para la comunidad de Hadas ya que utilizaban sus propiedades para varias funciones: las abejas hacían la miel con el polen de las flores, del tallo extraían un aceite de savia para dar brillo y fuerza a las alas de cada hadita, los pétalos eran los protagonistas de los postres más ricos y además de todo eso, la flor era símbolo de la alegría y la fuerza de toda la pradera. 

En los últimos 10 días  la sequía de los girasoles se había convertido en el único tema de conversación de cada rincón. Vainilla y sus hermanas notaban la preocupación de todos y sabían cual era la solución pero nadie se animaba a proponerla: "No queda opción!, tendremos que ir al Centro del Rincón de Fuego y buscar más semillas.", expreso Vainilla con mucha seguridad.

"Pero hermana, el camino es muy largo y tiene muchos obstáculos, la última vez que un grupo de hadas fue hasta allí nunca volvió y no sabemos que sucedió realmente, tengo miedo que si vas algo terrible te pase", le dijo Dulce de Fresa a Vainilla.

"No tenemos opción, todos lo sabemos", Vainilla contestó. 

En ese momento Chocolate y Café llegaban a la Pradera para saludar a sus amigas las hadas y pasar una tarde tranquila y calma. Cuando Dulce de Fresa lo vio llegar exclamó: " Que bueno tener amigos como ustedes!, los necesitamos y acá están". Las haditas le contaron a Chocolate el viaje que planeaban y el no dudó ni un momento en acompañar a Vainilla a la mágica e inquietante aventura. 

"Debemos tomar y llevar el cofre cristal para guardar la mayor cantidad de semillas posibles cuando las encontremos. Vainilla toma lo que necesites porque tendremos un largo viaje, serán varios días de caminos y sorpresas inquietantes pero juntos podremos hacerlo. Llevaremos a Café para que nos guie en el camino, y volveremos con todas las semillas necesarias para que los girasoles de oro vuelvan a crecer con fuerza y energía.", afirmó Chocolate.

Así Vainilla y Chocolate emprendieron un largo viaje. En sus mariposas gigantes sobrevolando por lo bajo la pradera y el valle, pudieron tomar el camino hacia "El bosque empinado" que desde lejos ya se veía oscuro y temeroso.




jueves, 1 de septiembre de 2022

Marcus y Dalia

 Se estaba acercando el cumpleaños nro. 9 de Julián y el quería hacer un festejo distinto a todo el resto de sus amigos. Algunos habían festejado con partido de futbol, o rugby, otros habían preferido un día de juegos en la plaza, las nenas habían elegido fiesta de disfraces.

Julián quería hacer algo diferente a todos, pero no sabía bien que preparar  y le consultó a su prima Agustina que era mayor que él.  Agustina pensó en una fiesta original, y distinta. Sabía que a Julián le gustaba mucho bailar, hacer acrobacias, y la música en general, así que le propuso armar un concurso de baile, por equipos. Cada equipo debía elegir una coreografía, una canción y la tía de Julian y su abuelo serían el jurado. El equipo que mejor bailara ganaría más premios.

Al día siguiente Julián fue al colegio muy contento anunciando en su clase el festejo de su cumpleaños. La noche anterior se había quedado preparando las invitaciones con su prima, eligiendo la música y pensando en que piruetas realizar. Al tocar el timbre del primer recreo Julián reunió a todo la clase y repartió las invitaciones explicando de que se iba a tratar la fiesta. La mayoría de los niños se quedaron cayados, y solo María y Brisa exclamaron: "Qué divertido!".

Pasaron  los días, y cada compañero, uno por uno le iba diciendo a Julian que no podían asistir a su fiesta. Uno tenía otro cumpleaños, el otro tenía que estudiar o asistir a un evento familiar. Algunos no dijeron nada, pero tampoco confirmaron.

Julián estaba muy triste, no podía entender que había sucedido con sus amigos, que siempre festejan todos los cumpleaños  con mucha alegría y entusiasmo. Al llegar a su casa, luego de la última clase, Julián se fue a su cuarto casi sin merendar. Entró y cerró la puerta, no quería que ni su prima ni su abuelo notaran que él estaba muy triste.

Mientras tanto, en el colegio,  habían quedado varios de los niños en una clase de ajedrez después de hora. Empezaron a hablar de la fiesta de cumpleaños de Julian pero ninguno se animaba a decir lo que realmente les pasaba o sentían, porque varios no querían asistir.  

Era momento de ayuda para los niños!: Alesia, Dipy, Nupi, Midy, Marcus y Dalia, los duendes y hadas de las emociones, estaban disponibles para ayudarlos a poder expresar y escucharse con sinceridad y atención.

Alesia entró por la ventana y posando sobre el hombro de una de las niñas le dijo: "Que lindo que tienen un cumpleaños para compartir con amigos! todas las celebraciones son bienvenidas!". Dipy, sumó su comentario exclamando: "Además las fiestas son divertidas y emocionantes!!!!, nosotros podremos ir?"

Nupi advirtió una rara sensación y también comentó: "No ven que los chicos no están ni contentos ni divertidos ni alegres?, no se dan cuenta que algo sucede!?". Alesia, Nupi y Dipy empezaron a discutir y hablar cada vez mas fuerte sin escucharse, algunos niños se empezaron a enojar, otros comenzaron a llorar. El patio del colegio se había vuelto caótico y los chicos estaban cada vez mas tristes, enojados, y repetían que no iban a ir al cumple de Julian.

Por suerte, Marcus, temeroso y casi en silencio,  suspiró: "Y si el problema no es el cumple de Julian?, que pasaría si Julian hiciera otro tipo de festejo, como un partido de futbol, un picnic, o un par de juegos y una merienda en la plaza....". Los niños en seguida comenzaron a calmarse y afirmaron que irían a ese tipo de eventos. Dalia se animó a preguntar: "Qué sienten con el cumple que Julian pensó?, no les divierte?, no les gusta esa forma de festejo?"

Mucho de los niños pudieron manifestar que no les gustaba bailar en publico, mucho menos armar equipos de competencia, que tenían mucha verguenza por eso no iban a asistir. Algunas de las chicas también acotaron  que si bien bailar era divertido, les provocaba bastante miedo pensar en realizar piruetas y acrobacias junto con coreografías que no conocían.

Finalmente los duendes y haditas ayudaron a los niños a conversar con Julian acerca de sus miedos, la verguenza que sentían al pensar en exponer sus bailes y la tristeza por decepcionar a Julian en su fiesta de cumpleaños. Julian los escuchó, pudo entenderlos y cambió alguna de las pautas para que todos los niños puedan asistir y se sintieran contentos de compartir con él ese momento.

El cumple pasó, la fiesta fue un éxito, y todos los niños y niñas pudieron bailar, cantar, jugar y divertirse con alegría y emoción.



martes, 9 de agosto de 2022

Nupi y Midi

 En la clase de matemática Juan y Lucia tenían que resolver un problema de sumas y restas que el profesor les había dejado como desafío. La consigna era clara, cada equipo tenía que realizar dos ejercicios, y el  que terminaba primero,  y además llegaba al resultado correcto, ganaría un premio sorpresa y un día adicional libre de juegos en el patio.

En la clase de Mateo, el profe de matemática, había 16 alumnos,  Mateo los dividió en 8 equipos de 2 personas cada uno. Al anunciar el ejercicio los niños no pudieron ponerse de acuerdo solos para formar los equipos. Los que eran mejores amigos querían estar todos juntos, pero Mateo quería que los chicos además de aprender sumas y restas, puedan formar equipos de trabajo aprendiendo a escucharse, entenderse y razonar, no siempre trabajando entre amigos, lo cual facilitaba un poco la cosa.

Luego de 15 minutos de caos, gritos, alegrías y hasta algún llanto, el profe decidió aplicar un sorteo para armar los grupos, y así fue como Juan y Lucia terminaron siendo el equipo B.

"Yo no pienso estar con él", dijo Lucia en voz alta y clara. 

"Antes de formar equipo con ella, prefiero no realizar el ejercicio", pronunció Juan, sin entender que realizar la tarea no era una opción sino una obligación.

El profe había indicado que los ejercicios podrían hacerse o bien en las horas de clase, o bien, si no finalizaban reunirse fuera del colegio  y entregarlo al día siguiente. Juan y Lucia no hicieron nada en lo poco que quedaba de clase, se la pasaron peleando y discutiendo , pasaban las horas y ellos no tenían ni el enunciado copiado.

De repente, tocó el timbre, que indicaba el fin de la jornada, y todos se levantaron, guardaron sus útiles y se dispusieron a salir al patio para formar y retirarse.

En ese momento, Juan y Lucia empezaron a discutir, y terminaron llorando casi sin consuelo en la oficina del director. Mateo el profe y el director del colegio, trataban de ayudarlos y calmar a Juan y a Lucia que lo único que hacían era gritar: "No quiero, no puedo, equipo con vos es imposible...."

Por suerte, Vainilla andaba por ahí, recogiendo algunas flores del jardín delantero del colegio, y pudo entender que este conflicto requería de la ayuda de Nupi y Midi, porque percibía en los chicos, mucha angustia pero no podía entender el motivo. 

Nupi y Midi eran dos duendes, que trataban de ayudar a los niños a comprender los enojos y las tristezas. Junto con Alesia y Dipy, formaban parte del equipo de las EMOCIONES y su misión era ayudarlos  a poder expresarse, porque no es lo mismo sentir angustia, estar molesto, sentir miedo, o desconfianza. Todas las emociones tienen su causa, su forma, y su color....

Nupi, duende gruñón, se paró frente a Lucia, porque la niña no paraba de gritar diciendo que el equipo que le había tocado era el peor. Midi, duende melancólico,  se sentó al lado de Juan, y tomándolo de la mano le pregunto: "Juan, porque lloras de esa manera?, que es lo que te angustia tanto?, podés confiar en mi".

Juan lo miró, y le dijo que le angustiaba no poder entregar los ejercicios a tiempo, ya que su tío le había prometido llevarlo al parque siempre y cuando no tenga tarea para resolver. A Juan, le costaban un poco las matemáticas y sabia que mientras mas tiempo tardaría, menos tiempo le quedaría para entregar el trabajo.

Lucía, luego de un rato, logró confesarla a Nupi que lo que la enojaba mucho era que el profesor no la haya puesto en equipo con la mejor alumna de la clase, ya que Lucia era muy buena en matemática  y sabia que si hacía equipo con Laura, muy posiblemente ganarían el ejercicio y se llevarían el premio.

Nupi y Midi lograron entender lo que a cada uno de los niños le sucedía, y por lo tanto decidieron juntarse los 4 a conversar acerca de lo sucedido: Midi comenzó: "Juan tiene miedo de no poder entregar el trabajo a tiempo y perder la oportunidad de que su tío lo lleve a jugar al parque. En realidad no tiene problema de hacer equipo con Lucia, pero no quiere seguir perdiendo tiempo discutiendo, porque cada vez queda menos...."

"Lucia quería hacer equipo con Laura, para asegurarse que entregarían el trabajo primeras, saben que juntas son veloces y se llevan bien realizando cálculos, pero ya entendió que no siempre se puede elegir el compañero para trabajar, por lo pronto está dispuesta a intentar concentrarse y trabajar con Juan", comentó Nupi.

En ese momento los papas de Juan y Lucia llegaron a la oficina del director para retirarlos del colegio. Lucia miró a su papa y le pidió si podía invitar a Juan a su casa dado que tenían que trabajar juntos, y así sucedió.

Al día siguiente, todos los trabajos fueron entregados a tiempo y el profe realizó la corrección en conjunto con toda la clase para que todos aprendieran a resolverlo. Juan y Lucia no solo aprendieron a trabajar en equipo, sino que además empezaron a ser un poquito más amigos y le propusieron a Mateo mantener los equipos de trabajo para todos los problemas matemáticos que les quedaban por resolver en ese mes.